Siempre buscamos nuevas formas de extraer energía, por ejemplo con el sol, a través de la energía solar o con el viento a través de la energía eólica, pero ¿Alguna vez pensaste que se pudiera obtener energía de la nieve? Aunque suene muy extraño, en Noruega esto ya es una realidad, pero ¿Cómo es posible esto? Quédate para descubrirlo.
Noruega hace un descubrimiento impresionante
Siempre hemos pensado que la nieve es un gran enemigo de los paneles solares, ya que, si hay nieve, no debería haber sol, pero al parecer estábamos equivocados, pues en el extremo norte de Noruega, han convertido la nieve en su mejor aliado.
Durante años, los países con inviernos largos han visto la nieve como un obstáculo insuperable para la energía fotovoltaica. La acumulación de hielo y las horas limitadas de luz hacían que las instalaciones solares fueran ineficientes o directamente inútiles.
El país ha implementado un sistema ingenioso en la ciudad de Tromsø, al norte del Círculo Polar Ártico y se trata de una solución permite a la energía fotovoltaica funcionar eficientemente incluso en latitudes donde el sol está a la altura del horizonte. En este proyecto se instalaron 6400 paneles.
Pero la clave del éxito no está en un nuevo material o un invento futurista, sino en poner los paneles de pie. La instalación de paneles solares verticales (VPV) es, de hecho, la más grande del mundo y demuestra que los inviernos extremos son un momento ideal para generar mucha más electricidad.
La nieve es un aliado de los paneles solares
La genialidad del sistema vertical está en aprovechar lo que se llama el Efecto Albedo, pero ¿Qué significa esto? En términos sencillos, el blanco brillante de la nieve que cubre el suelo actúa como un espejo gigante, reflejando la luz solar hacia arriba.
Al instalar los paneles en posición vertical, estos capturan la luz que viene del sol de forma horizontal y, al mismo tiempo, la luz que es reflejada por la nieve. El resultado es una idea tan ingeniosa como las turbinas sin aspas y un aumento en la producción de energía
La protagonista detrás de esto es la empresa noruega Over Easy Solar, que realizó la instalación récord en Tromsø, y ella estima que este truco puede incrementar la producción total en más del 30% en promedio.
Esto sucede porque, a diferencia de un panel plano, la nieve no se acumula sobre la superficie del panel vertical para bloquear la luz, sino que rebota en el suelo para alimentarlo, creando un doble aprovechamiento.
El fin de los daños y el deshielo rápido
Pero más allá de la producción de energía, los paneles verticales tienen muchas ventajas comenzando por la protección del techo. Los paneles tradicionales concentran su peso en puntos muy específicos, y esa presión, sumada a la nieve acumulada, puede dañar la superficie.
Pero con los sistemas verticales este problema no existe, ya que la nieve se acumula directamente sobre el techo, distribuyendo la presión de manera uniforme y minimizando así los riesgos. Pero eso no es todo, porque el segundo beneficio es la limpieza pasiva.
Según la experiencia noruega, los paneles verticales también ayudan a derretir la nieve mucho más rápido. Funcionan como ‘removedores pasivos’ de la nieve al promover la circulación de aire y absorber el calor del sol.
Sin duda la instalación de los paneles solares verticales ha llegado para cambiar nuestra visión sobre la energía solar, demostrando que la innovación nunca se detiene y que incluso los elementos que podíamos considerar enemigos, como era el caso de la nieve, pueden ser grandes aliados. Y si quieres ver más avances como este acá te contamos sobre el ventilador que da energía todo el día.