Vandana denuncia a Gates y a su filantro-imperialismo
En marzo de 2015, Bill Gates mostró una imagen del coronavirus durante una conferencia TED y declaró a la audiencia que esta parecería … Leer Más
En marzo de 2015, Bill Gates mostró una imagen del coronavirus durante una conferencia TED y declaró a la audiencia que esta parecería … Leer Más
Ulrich Brand es co-autor del bestseller “Modo de vida y trabajo imperial”. El profesor de ciencias políticas de la Universidad de Viena explica … Leer Más
Para salvarse, los monopolios internacionales transfirieron sus exceso de capital a los países de BRIC (Brasil, Rusia, India, China – ahora se llama BRICS después de la participación de África del Sur) y a los países como Taiwán, México, Tailandia, Argentina, Corea del Sur, Turquía, países que se definen como "mercados emergentes". De hecho, como consecuencia, se ve una cierta reactivación, e incluso el aumento en la economía en estos países, mientras que en la mayoría de los otros países, incluidos los países imperialistas occidentales, la economía tocó fondo. El centro la crisis era Estados Unidos, Japón, y en especial en Europa.
Una de las lecciones que los halcones norteamericanos aprendieron luego de la derrota sufrida en Vietnam es que el control del frente interno -es decir, la orientación de la opinión pública en la retaguardia- puede llegar a ser tan determinante como la fuerza del aparato militar que se despliegue en el teatro bélico. De ahí que desde entonces la industria cultural estadounidense se haya dedicado -salvo honrosas y marginales excepciones- a “re-educar” a la población para que conciba a las guerras de rapiña que conduce el imperio como heroicas cruzadas destinadas a perseguir a monstruosos terroristas.
Conceptos tales como “keynesianismo militar” o “economía de la guerra permanente” constituyen buenos disparadores para entender el largo ciclo de prosperidad imperial de los Estados Unidos: su despegue hace algo más de siete décadas, su auge y el reciente ingreso a su etapa de agotamiento abriendo un proceso militarista-decadente actualmente en curso.
Lo verdaderamente serio y auténticamente necesario, lo único que puede representar una salida real a la crisis múltiple por la que ahora atraviesa la humanidad no puede ser la salvaguarda del sistema de “libre empresa”, de la civilización capitalista con toda su podredumbre; tampoco puede ser la de aprovechar la crisis, como ha ocurrido siempre en momentos semejantes, como una gran oportunidad de negocios para unos cuantos a costa de la ruina de millones; por el contrario, lo que cabe es sacudirse, de una vez por todas, el sistema capitalista antes de que el mismo acabe con toda forma de vida sobre el orbe.
Han usurpado el nombre de América sólo para si, a pesar de que exterminaron a casi todos los pobladores originales de esta tierra. A pesar de que su sistema electoral es el mas imperfecto, cuestionable, arcaico y antipopular de los que existen, gustan de llamarse a si mismo como “La Democracia” y como enemigos de la misma a cualquiera que se oponga a sus intereses imperiales.
Para implantar la soja en Argentina como en tierra conquistada sus promotores se han valido del deslumbramiento tecnológico, indisolublemente unido a la idea de progreso. El complejo sojero se asienta en Argentina a mediados de los ‘90 con la anuencia o la entrega incondicional del menemato a las orientaciones orquestadas desde el norte.
La globalización ha sido presentada como la medicina milagrosa que solucionaría todos los problemas de la humanidad, entre ellos el hambre. Sin embargo, esa globalización la ha acrecentado, generando una realidad profundamente injusta en términos alimenticios, donde al mismo tiempo unos pocos consumen hasta el hartazgo, mientras que millones de seres humanos soportan la desnutrición o mueren de hambre.
Tanto en Argentina, como en Venezuela, en Uruguay y en todas partes, deberíamos referirnos a una suerte de restauración de una agricultura propia, que existió en tiempos previos a la globalización, ya que no había pueblo que pudiera ser tal sin poder alimentarse.
Enfrentamos nuevos desafíos, quizás mas peligrosos, el imperialismo se abalanza sobre el Agua, como se abalanzo sobre el oro en la primera conquista de América, el capitalismo decrepito hoy se torna mas peligroso, la paradoja agua – diamante se extingue como tal
Para promover la inversión y facilitar el comercio, el Perú debe privatizar el sector público, incluyendo un masivo asalto a las funciones del poder judicial, las municipalidades y gobiernos regiones. Eso es para el Perú. Por otro lado, para EEUU el TLC es un simple acuerdo comercial a cargo del Departamento de Comercio.
El hemisferio norte contiene la mayor parte de la moderna tecnosfera y la riqueza que la misma genera. El hemisferio sur contiene la mayor parte de la gente, casi toda desesperadamente pobre. El resultado de esta división es una dolorosa ironía global: los países pobres del sur, sufren los riesgos ambientales generados por la creación de esta riqueza en el Norte.
Como podemos creer en las instituciones si estas no nos tratan con dignidad?
Si revisamos la historia nos han utilizado para hacernos pelear y nos han contado la historia como una gran mentira desde sus interéses y dominacion.
Hablo desde la otra cara de la piel de las mujeres, mis hermanas indígenas y no indígenas, soy Quechua.