Este martes, el video del diputado de Morena y gloria del fútbol mexicano Cuauhtémoc Blanco jugando pádel durante una sesión remota del Congreso desató una ola de críticas debido a que el hecho fue grabado mientras el legislador sostenía su celular aparentemente conectado a la reunión.
Sheinbaum marca distancia del caso de Cuauhtémoc Blanco
Durante su conferencia de prensa matutina llamada «La Mañanera», la presidenta de México Claudia Sheinbaum fue consultada directamente por el comportamiento del legislador, pero decidió no emitir juicio alguno. Con serenidad y tomando distancia, respondió: «Cada quien debe tomar su opinión».
La mandataria hizo hincapié en que su administración no intervendría en el caso y recordó que su gobierno busca servir a todos los sectores, pero en este caso se trata del exfutbolista que tuvo conflictos en el año y mantuvo su fuero pese a eso.
«Se gobierna para todas y para todos, y por el bien de todos, primero los pobres», expresó marcando que la postura dejó ver un límite institucional porque la conductora de los diputados es un asunto que compete a la Cámara baja, no al Ejecutivo.
Fue en ese momento que Sheinbaum decidió no opinar sobre el episodio que involucra a Blanco, aunque la polémica crecía en redes y medios. «La Cámara de Diputados tiene suficiente criterio para determinar si procede una sanción o no», puntualizó.
La competencia de la Cámara de Diputados
Sheinbaum reiteró que no le correspondía juzgar ni calificar las acciones de los legisladores. «Ellos deben decidir qué es factible y qué no lo es», insistió, al ser cuestionada sobre posibles sanciones disciplinarias para el exfutbolista.
Bajo este aspecto, el reglamento interno del Congreso contempla sanciones por ausencias injustificadas o por no participar en las sesiones, pero no menciona expresamente qué ocurre si un diputado realiza actividades paralelas durante una sesión virtual.
Lo cierto es que este vacío normativo ha abierto un nuevo debate sobre la efectividad del trabajo remoto en el Poder Legislativo, pero desde la Secretaría General de la Cámara de Diputados se informó que el caso sería analizado conforme a las normas internas.
Por otro lado, ante los hechos, la institución revisará los lineamientos vigentes sobre participación telemática para determinar si el comportamiento del diputado vulneró los principios de responsabilidad parlamentaria.
Debate sobre sesiones virtuales: Sheinbaum recibe cuestionamientos
La presidenta también fue cuestionada sobre el uso de plataformas digitales para las sesiones oficiales, un mecanismo instaurado en 2020 por la pandemia de Covid-19, pero la mandataria defendió el formato remoto en circunstancias específicas, pero advirtió sobre el riesgo de abusar de él.
«Es un instrumento que a veces ayuda, pero no se debe abusar», dijo, siendo que luego explicó que en su administración las reuniones a distancia son útiles; así indicó que durante las sesiones del comité de emergencia nacional, donde participan funcionarios de distintos estados.
«A las siete y media de la noche nos conectamos todos; algunos están en Veracruz, otros en Hidalgo…no los puedo hacer venir todos los días», ejemplificó, pero fue clara en señalar que los temas fundamentales de la República requieren presencia física y deliberación directa. «Cada institución debe regular cómo se aplica», concluyó.
Por eso su postura, aunque prudente, dejó entrever una advertencia: la tecnología puede facilitar el trabajo público, pero no reemplaza la responsabilidad que conlleva, pero la líder mexicana, fiel a su estilo, optó por no entrar en la polémica y dejar que las instituciones hagan su parte, teniendo en cuenta que Blanco ya tiene una sentencia por violencia de género. Pero esta situación reabrió un debate más grande que incluye la ética y el compromiso en cuanto a lo que rodea a los funcionarios públicos.