Sabemos que el tráfico es un gran desafío para todas las ciudades, sin embargo, mientras que en la mayoría de las ciudades, se ha optado por restringir la circulación de coches con medidas como el clásico ‘Hoy No Circula’, un municipio vecino ha decidido innovar con una estrategia completamente diferente. Veamos de qué se trata.
Un municipio con una estrategia diferente
El tráfico es un problema constante que gobiernos de todo el mundo intentan resolver, sin embargo, la mayoría suele preocuparse de los coches tradicionales que son los más abundantes y recurren a medidas como el ‘hoy no circula’ pero ahora un municipio ha tomado otro camino.
En lugar de limitar a los coches por su número de placa, ha puesto el foco en el transporte de carga pesada, a través de una normativa busca equilibrar la intensa actividad logística de la zona con la necesidad de garantizar una mejor movilidad y reducir los riesgos viales.
El protagonista de esta nueva norma es el municipio de Cuautitlán, en el Estado de México donde entró en vigencia un Reglamento Municipal para la Protección del Derecho Humano a la Movilidad, donde el transporte de carga superior a 5 toneladas sólo podrá circular en horarios específicos.
Pero esta norma no es solo una prohibición, sino una ventana de oportunidad para modernizar sus procesos, ya que ahora como los transportes de carga tendrán horarios específicos, las horas pico quedarán libres de vehículos pesados.
Un nuevo control, un nuevo orden
El nuevo reglamento permite la circulación de transporte pesado únicamente entre las 10:00 y las 17:00 horas y de 22:00 a 05:00 horas, pero la restricción más importante se aplica durante las horas pico de tráfico, es decir, de 05:01 a 09:59 y de 17:01 a 21:59.
En estas franjas horarias, el tránsito de vehículos pesados queda prohibido y adicionalmente, se han establecido límites de velocidad claros, de 30 a 60 km/h en vías principales y de 20 km/h en zonas escolares u hospitalarias.
Para la industria, el principal desafío será el incremento de los costos operativos. La nueva normativa obligará a las empresas a ajustar sus turnos, contratar seguridad adicional para las operaciones nocturnas o mantener sus flotas inactivas durante las horas restringidas.
Los transportistas que dependan de entregas «justo a tiempo» podrían enfrentar retrasos que afectarían su relación con clientes clave y a su vez, el desvío de camiones hacia vialidades alternas podría trasladar la presión del tráfico a municipios vecinos.
Pero si lo vemos por el lado positivo el nuevo reglamento también es una oportunidad para modernizar la gestión, de hecho hasta la CFE se a modernizado y las empresas pueden usar software de gestión de transporte que les permitan monitorear los horarios y optimizar las rutas.
Los cambios también son buenos
La transición hacia este nuevo sistema no debe verse solo como una imposición, sino como una oportunidad para que las empresas rediseñen sus operaciones y aquí, es de suma importancia que las compañías reprogramen sus rutas y turnos para aprovechar al máximo las franjas horarias autorizadas.
Para asegurar un cumplimiento efectivo, también será fundamental solicitar con anticipación los permisos de carga y descarga, garantizando que cada unidad cuente con la documentación necesaria para evitar sanciones.
El éxito dependerá en gran medida de la comunicación con los clientes, así que las empresas deben informarles sobre los cambios y trabajar de la mano para ajustar las ventanas de recepción de mercancía, lo que ayudará a evitar fricciones y a mantener la continuidad en la cadena de suministro.
No podemos negar que este nuevo reglamento, representa un gran desafío, tal como sucede con la llegada de nuevas multas, pero también una oportunidad para que la industria del transporte modernice sus operaciones y precisamente, aquellas empresas que abracen estos cambios también se posicionarán para ser más eficientes, rentables y competitivas.