Con el escrutinio especial en marcha y presiones de frentes internos y externos, el candidato a presidente Salvador Nasralla criticó a los organismos internacionales y volvió a exigir que se cuente voto por voto. Mientras tanto, el CNE estaría en condiciones de proclamar a Nasry Asfura como ganador, ante la atenta mirada y presión de los Estados Unidos.
Honduras acéfala
El pasado 30 de noviembre se celebraron las elecciones ejecutivas nacionales que debían determinar al sucesor de Xiomara Castro en la presidencia de Honduras. Estando a menos de una semana de que se cumpla un mes, los ciudadanos hondureños siguen sin tener la certeza de quién llevará las riendas de su nación durante el próximo período presidencial.
Las denuncias de fraude constante, la injerencia extranjera y la paridad entre los dos candidatos más votados, generaron condiciones que decantaron en trabas constantes e interrupciones del escrutinio que llegaron a durar días. En este contexto, parecía que finalmente se había determinado un ganador: Nasry Asfura, candidato del Partido Nacional que fue apadrinado por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
En la noche del martes, la Comisión Nacional Electoral de Honduras informó a través de un comunicado que estaban dadas las condiciones para declarar un ganador, habiéndose escrutado el 99,2% de los votos. «Se sugiere emitir la declaratoria de Elecciones Generales 2025, en el nivel presidencial, con los datos que hasta este momento se tienen a disposición por parte de la Comisión de Seguimiento TREP o, en su defecto, la Dirección de Sistemas y Estrategias Tecnológicas», explicó el comunicado de la CNE.
Nasralla no está conforme
En las últimas horas, el candidato del Partido Liberal, Salvador Nasralla, que se encuentra detrás de Asfura en el conteo especial por menos de un punto porcentual, volvió a reclamar por inconsistencias en el escrutinio, asegurando que hasta no contar el último voto no estaría definido el vencedor.
«¿No vieron este fraude los miembros de la misión de observación de la Unión Europea? ¿Ni tampoco los miembros de la misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA)?», preguntó irónicamente Nasralla a través de una publicación en su cuenta oficial de la red social X, que acompaña con un vídeo en el que señala y explica las presuntas irregularidades.
Es por esto, explica el candidato a presidente hondureño en su mensaje, «que estoy pidiendo que cuenten voto por voto 10 000 urnas que equivalen a 2 millones de votos», e invitó a sus seguidores a que realicen el trabajo de buscar la información que está exponiendo por ellos mismos.
Amenazas desde el norte
Por otro lado, la Secretaría General de la OEA enfatizó que los organismos electorales hondureños deben certificar el resultado de las elecciones presidenciales antes del 30 de diciembre, según lo dicta su propia constitución. Teniendo en cuenta esto, el ente internacional hizo una petición urgente a los técnicos y autoridades encargadas del sufragio para que definan un ganador lo antes posible, siempre dentro del marco legal correspondiente y otorgando garantías a todos los actores políticos.
Sumado a esto, la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, dependiente del Departamento de Estado de los Estados Unidos, exigió el pasado lunes al gobierno de Honduras que termine el conteo oficial de las elecciones. Desde Washington aseguraron que cualquier intento de obstrucción al trabajo del CNE traería consecuencias.
A través de una publicación en la red social X, el gobierno estadounidense señaló lo «profundamente problemático» que es que ciertos partidos políticos y candidatos pongan trabas en el avance del proceso electoral, apuntando contra los sectores que siguen generando retrasos e incertidumbre alrededor del escrutinio de los votos. La sociedad hondureña esperó demasiado tiempo, y ya es momento de que sepan los resultados gracias a un proceso transparente y creíble.
