Dos empresas brasileñas que son parcialmente propiedad de un importante donante del presidente de EE.UU., Donald Trump, y el líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, tienen gran parte de responsabilidad en la continua destrucción de la selva amazónica.
"Una carnicería que se ha convertido en furiosos incendios que han captado la atención mundial", así lo informa un reciente artículo de The Intercept. Estas dos empresas son Hidrovias do Brasil y Pátria Investimentos, ambas propiedad de la compañía de inversión estadounidense Blackstone, cuyo cofundador y CEO es Stephen Schwarzman, un aliado cercano de Trump.
Estas compañías "han arrebatado el control" de varias hectáreas de tierra en la selva amazónica, construyendo una polémica carretera hacia su nueva terminal de embarque en Miritituba, dirigida por Hidrovias do Brasil, en el estado brasileño de Pará, para facilitar el cultivo y la exportación de granos y soja.
Hace unos meses, el gobierno de Bolsonaro anunció que Hidrovias do Brasil mejoraría una carretera en el Mato Groso, duplicando su capacidad de envío de granos a 13 millones de toneladas y potenciando la deforestación. "El desarrollo de la carretera en sí causa deforestación, pero lo más importante es que ayuda a hacer posible una transformación más amplia de la Amazonía convirtiendo selva en tierras de cultivo", reza el artículo.

"El esfuerzo por transformar a la Amazonía de una selva tropical en una fuente de ingresos para el agronegocio es fundamental para el conflicto, y está relacionado con los incendios que hoy se descontrolan", continúa la nota.
Ecoportal.net
Fuente: Spanish Revolution