El Koala, próximo a desaparecer de la Tierra

El calentamiento global se está volviendo cada vez más irreversible y las desastrosas consecuencias de todo este cambio climático en el planeta van mucho más allá del aumento del nivel del mar. Muchos animales están perdiendo sus hábitats naturales y se han unido a la Lista Roja de la UICN para siempre, uno de ellos es el carismático koala.

Debido a que es un animal con hábitos restringidos y difícil de adaptar, el koala puede extinguirse de inmediato, mientras que las cucarachas, los ratones y los microbios pueden dominar el planeta.

¿Por qué el koala será uno de los primeros en desaparecer de la tierra?

Como es bien sabido, y según una investigación publicada por BBC News, la principal fuente de alimento de los koalas son las hojas de eucalipto. El gran problema es que estas hojas se están volviendo cada vez menos nutritivas debido al aumento de CO2 en la atmósfera.

Es decir, el cambio climático aumenta el riesgo de inanición de los koalas.

Además, los koalas tienen una baja diversidad genética, lo que hace que esta sea una característica preocupante cuando se trata del riesgo de extinción. Esta especie (Phascolarctos cinereus), considerada por los científicos como “especializada” para vivir en hábitats de montaña y bosques de alta latitud, así como aquellos que viven en ambientes limpios, es una de las más susceptibles a la extinción.

Lo mismo no es cierto para los ciervos en los Estados Unidos, por ejemplo, ya que los ciervos se consideran especies “de sucesión temprana” que los investigadores dicen que pueden adaptarse a entornos perturbados, incluido el cambio climático. Los investigadores también llaman a estas especies “generalistas móviles” porque pueden moverse y adaptarse a diferentes entornos.

Sin embargo, esta adaptabilidad puede ser costosa para otras especies de ecosistemas. En el caso de las plantas, por ejemplo, las malezas que se encuentran comúnmente en la carretera pueden ser mucho más resistentes en comparación con otras plantas.

Todo esto se debe a las intervenciones humanas, con el creciente aumento de las zonas urbanas. Como consecuencia, se puede ver que las especies más resistentes son aquellas que pueden vivir en ambientes artificiales. Por ejemplo: parques, jardines urbanos, áreas agrícolas, granjas, plantaciones de árboles, etc.

Sobrevivirá el fuerte, no el lindo

Según los expertos, los animales que pueden adaptarse a estos entornos son pequeños, preferiblemente endodérmicos, omnívoros y capaces de vivir en condiciones extremas (así, como dijimos anteriormente, las cucarachas, las ratas y los microbios podrían ser los grandes herederos de lo que quedará de la tierra).

Esto concluye una vez más que el futuro de las especies esponjosas y menos resistentes, como los koalas, depende únicamente de nosotros. Es por eso que es tan necesario reducir los gases de efecto invernadero, proteger la biodiversidad, restaurar la conectividad entre hábitats, reducir la contaminación y extraer tierra, entre otras medidas que deben tomarse con urgencia.

Además, la acción principal de nuestra parte para evitar que nuestro planeta se entregue a las cucarachas y los microbios está ciertamente relacionada con la ruptura de las barreras políticas y esta lucha solo se ganará con nuestra unión.

Por Eliane A Oliveira, artículo en portugués