Gracias al telescopio James Webb, los científicos han logrado descubrir uno de los secretos que mejor guarda el universo, puesto que se trata de un acontecimiento único, que ha permitido el entendimiento del despertar de un peligro, que representa una amenaza en el cosmos, lo que simboliza el avance al conocimiento y comprensión del desarrollo de nuevos eventos galácticos.
James Webb: el telescopio que tiene lo que otros no
Si bien, los astrónomos del Instituto tecnológico de Massachusetts (MIT), lograron el descubrimiento del despertar de un peligro galáctico, lo hicieron con la ayuda del telescopio espacial James Webb (JWST), que cuenta con una capacidad infrarroja, (que otros telescopios no tienen).
Con esta capacidad infrarroja que nos ofrece el JWST, los científicos tienen la habilidad de poder observar a través de las nubes espesas de polvo interestelar, lo que los ha llevado a identificar señales de eventos que antes no se podían detectar con la ayuda de otros telescopios.
Por su parte, lo que estos científicos lograron descubrir, es el despertar de un agujero negro y la destrucción estelar que genera, (sin duda alguna, un despertar realmente peligroso), algo que marca un antes y un después para la evolución del conocimiento sobre estos fenómenos.
Un despertar peligroso
Anteriormente, se creía que los gigantescos agujeros negros, que se encontraban «dormidos», permanecían inactivos por largos periodos de tiempo. Sin embargo, gracias a la capacidad infrarroja que tiene el JWST, se evidenció como pueden despertar y absorber la materia que tienen a su alrededor.
De esta manera, cuando una estrella se acerca demasiado a un agujero negro, provoca su destrucción, debido a la gran cantidad de gravedad, y luego, los restos son absorbidos rápidamente por el agujero negro, irradiando un destello de energía. A lo que se le denomina «evento de disrupción de marea (TDE)».
Es de destacar que, gracias al JWST, el cual ha permitido diferentes descubrimientos, se ha determinado que debido al polvo galáctico que obstruía las señales de los otros telescopios, los eventos de disrupción de marea (TDE), resultaron ser más frecuentes de lo que los científicos imaginaban.
Ahora bien, ¿cuál es la diferencia entre los agujeros negros inactivos y los agujeros negros activos?
Cuando existe la presencia de agujeros negros dormidos, suceden los eventos de disrupción de marea (TDE), los cuales ocurren cuando una estrella se encuentra cerca del mismo, y logra ser destruida, despertando al agujero negro, el cual automáticamente absorbe sus restos.
Por otra parte, los agujeros negros que siempre se encuentran absorbiendo materia, son los agujeros negros activos, que generan «núcleos galácticos activos (AGN)». Es de destacar que, estos tipos de agujeros negros se pueden diferenciar, gracias a la precisión que ofrece el JWST.
Puesto que, el telescopio James Webb, genera unos mapas que permiten observar la distribución del polvo y de la energía que liberan los agujeros negros, identificando así características que diferencian a los ambientes galácticos activos de los inactivos.
De hecho, la información que se obtiene de estos mapas, es de gran utilidad, ya que permite obtener pistas sobre como los agujeros dormidos o inactivos, pueden llegar a crecer y la manera en como logran cambiar su entorno de manera exacta e inesperada, lo que genera la apertura para el conocimiento de las galaxias y su destino.
En el universo se esconde una gran cantidad de secretos, que los astrónomos buscan descubrir, como en el caso del enigma que se esconde dentro de los agujeros negros, los cuales, gracias a telescopios como el JWST, cada día nos acercamos a comprender todo lo que se encuentra en el cosmos, permitiendo con ello, revelar novedades para la astronomía y el conocimiento de las galaxias.