La empresa aeroespacial de Elon Musk, SpaceX, había planeado un nuevo vuelo de prueba de su cohete Starship. El lanzamiento estaba programado para las 18:30 hora local del domingo desde la base de la compañía en el sur de Texas. La misión tenía como objetivo probar la capacidad de la nave para alcanzar el espacio y sobrevivir a la reentrada atmosférica.
Lanzamiento de Starship se ha suspendido en varias oportunidades
Los intentos de la importante empresa SpaceX con Starship se centran en la reutilización completa de sus componentes: el propulsor Super Heavy y la nave Starship. El objetivo principal es que ambos regresen a la Tierra de forma controlada después de cada vuelo, lo que permitiría una drástica reducción en los costes de futuras misiones espaciales, así como importantes beneficios para el medio ambiente.
Esta estrategia de reutilización rápida y completa es la clave de la visión a largo plazo de SpaceX. A diferencia de los cohetes tradicionales que se desechan después de un solo uso, el sistema Starship está diseñado para ser tan reutilizable como un avión comercial, con el fin de hacer que los viajes al espacio sean más accesibles y, en última instancia, permitan la colonización de otros planetas, reduciendo además la contaminación.
SpaceX señaló que podría volver a intentarlo el martes, pero la información aún no ha sido confirmada
El domingo 24 se aplazo el décimo lanzamiento del cohete Starship desde el sur de Texas. El despegue, habría sido visible desde el norte de Tamaulipas. El despegue fue aplazado debido a un problema técnico en la válvula de presurización del propulsor, lo que requirió una revisión exhaustiva del sistema antes de un nuevo intento. La compañía de Elon Musk no ha anunciado una nueva fecha para el vuelo de prueba.
Aunque todavía no lo han confirmado, SpaceX mencionó que podría haber un nuevo lanzamiento este martes. El equipo de SpaceX explicó que un problema técnico detuvo la cuenta regresiva momentos antes del despegue. Según los anfitriones del evento, tenían un par de soluciones para el fallo, lo que les permitía considerar un nuevo intento. Sin embargo, poco después de este anuncio, se informó la cancelación definitiva de la misión.
El éxito de la Starship es vital para el futuro de SpaceX y para las ambiciones espaciales de EU, sin embargo, SpaceX ha estado dispuesto a aceptar fallas y explosiones para mejorar sus diseños. Un ejemplo de esto fue el lanzamiento inaugural del cohete Falcon Heavy en 2018. En ese momento, Musk le dio solo un 50% de probabilidad de éxito, comparándolo con un gran espectáculo de fuegos artificiales, aunque finalmente fue un éxito.
Las dos partes del sistema Starship: propulsor Super Heavy y nave espacial Starship
Los planes en caso de realizarse este primer lanzamiento, la nave Starship no completará una órbita entera, pero alcanzará una altitud de 240 kilómetros sobre la Tierra. Esta altura se considera el espacio exterior. El sistema Starship está compuesto por dos partes principales: el propulsor Super Heavy, que tiene 33 motores, y la nave espacial Starship, que se monta en la parte superior.
El cohete propulsor Super Heavy es el encargado de dar el primer impulso en el despegue. Después de menos de tres minutos, consumirá todo su combustible y se separará de la nave Starship para caer en el océano. En ese momento, la nave Starship encenderá sus propios seis motores durante más de seis minutos para alcanzar una velocidad casi orbital.
Finalmente, la nave hará un recorrido parcial alrededor de la Tierra y volverá a entrar en la atmósfera cerca de Hawái. Se espera que aterrice en el océano, cerca de la costa, aproximadamente una hora y media después de su lanzamiento. Seguidores de SpaceX afirmaron horas antes del despegue que Starship es el cohete más grande jamás construido y un ejemplo del progreso tecnológico.