Una vez que nos damos cuenta de la importancia de cuidar nuestra alimentación y nuestro planeta, es primordial dar el primer paso: sustituir los alimentos convencionales por aquellos producidos de manera ecológica. Cuando nos referimos a alimentos ecológicos, estamos hablando de alimentos que han sido cultivados de manera respetuosa con los ciclos naturales. Esto implica que no han sido expuestos a productos fitosanitarios sintéticos como herbicidas, pesticidas o fertilizantes, y tampoco han sido modificados genéticamente.
Parámetros de eficiencia en el consumo de alimentos ecológicos
Los alimentos ecológicos, como frutas y verduras, son una excelente opción para mejorar la calidad de nuestra dieta. Estos alimentos son ricos en nutrientes y oligoelementos esenciales, como vitaminas, minerales y antioxidantes. Actualmente, se ha observado un considerable incremento en la disponibilidad de alimentos ecológicos. Sin embargo, es común que surjan dudas en relación a su consumo y exista el temor de que esto resulte en un aumento significativo en el costo de la compra. No tiene por qué pasar si se siguen parámetros de eficiencia en el consumo:
Planificar un menú semanal: Tener una lista de alimentos es un recurso muy útil para saber exactamente qué comprar. Esto evita hacer compras desordenadas y innecesarias. Además, es esencial para mantener una dieta equilibrada y variada que incluya todos los nutrientes necesarios. Conviene evitar los alimentos desnaturalizados, muy azucarados, grasos o procesados.
Elaborar listas de la compra. Organizar la lista de compras según el menú o los productos que se están agotando es una excelente manera de realizar una compra consciente y útil. Esto te permitirá adquirir lo que realmente necesitas y valoras, al mismo tiempo que evitarás comprar cosas innecesarias o superfluas.
Comprar productos de temporada: Al elaborar el menú, es crucial mantenerse informado sobre los productos disponibles en cada mes, ya que estos estarán en su punto óptimo de madurez y serán más económicos.
Comprar productos de proximidad: Si nos informamos sobre las temporadas de cosecha, podremos tomar decisiones más conscientes al momento de comprar alimentos. Podemos optar por adquirir productos locales o de cercanía en ferias y mercados ecológicos. De esta manera, estaremos contribuyendo a evitar el desperdicio energético y económico que implica comprar alimentos que han tenido que viajar desde otro hemisferio.
Otros parámetro útiles
Comprar cestas ecológicas. Existen productores locales que ofrecen la opción de recibir cestas ecológicas a domicilio de forma semanal. Estas cestas contienen una variedad de productos frescos y de temporada, a precios muy accesibles.
Participar en cooperativas de consumo: Una manera efectiva de reducir los precios de los productos es unirse con otras personas y realizar compras comunitarias. Esta práctica permite evitar intermediarios y depender menos de los grandes distribuidores, lo que puede traducirse en ahorros significativos.
Comprar a granel: La utilización de envases reutilizables contribuye a una mayor eficiencia ecológica al reducir el uso de embalajes innecesarios y plásticos. Estos envases son especialmente adecuados para alimentos secos como legumbres, cereales, semillas y frutos secos. Sin embargo, es importante asegurarse de que los productos sean de origen ecológico y estén dentro de su fecha de caducidad.
Producir alimentos: Contar con un huerto, incluso en un entorno urbano, o participar en uno comunitario, brinda la oportunidad de experimentar de primera mano la producción de alimentos. Esto representa un paso cualitativo hacia una vida más ecológica y resulta altamente gratificante.
Comer alimentos caseros. En muchos restaurantes, a menos que se indique lo contrario, los alimentos ecológicos no suelen ser utilizados. Una opción saludable es preparar nuestras comidas en casa o llevar fiambreras al trabajo con alimentos ecológicos. Además, podemos promover el uso de menús ecológicos en las escuelas de nuestros hijos.
Cocinar con materias primas. Con estas técnicas culinarias simples como ensaladas, cocción al vapor, a la plancha, al horno o hervidos, es posible cocinar platos económicos y saludables. Además, se pueden utilizar aderezos suaves elaborados con ingredientes como aceite de oliva, ajo y hierbas aromáticas en lugar de salsas procesadas.
Cocinar para más de una vez: La planificación del menú proporciona la oportunidad de preparar una mayor cantidad de ciertos productos, como caldos que pueden ser congelados en porciones individuales, o duplicar la cantidad de arroz y legumbres prevista. Esto se traduce en ahorros tanto económicos como de tiempo para tu negocio.
También podrías
Reciclar las sobras. Siguiendo esta misma idea, es recomendable evitar desperdiciar la comida que sobra y darle una segunda oportunidad a los alimentos que no se consumieron en la primera ocasión, siempre y cuando estén en buen estado. Esto se puede hacer presentándolos nuevamente tal cual o utilizándolos para preparar rellenos, croquetas u otras creaciones culinarias creativas.
Evitar los productos procesados. Es recomendable evitar el consumo de productos industriales que requieran conservación a largo plazo. En situaciones de viaje o emergencia, es más beneficioso optar por marcas ecológicas disponibles en el mercado. Estas alternativas suelen ser más saludables y respetuosas con el medio ambiente.
Comprar en supermercados ecológicos o locales. Los supermercados ecológicos se dedican exclusivamente a la venta de alimentos de este tipo. En estos establecimientos podrás encontrar una gran variedad de productos, todos ellos de alta calidad y cultivados respetando el medio ambiente. La mayoría de los supermercados convencionales están ampliando su oferta en productos ecológicos, pero es preferible comprar en establecimientos arraigados en el entorno.
Leer las etiquetas. Te permite evaluar el grado de ecología y salud de los ingredientes de un producto, y evitar posibles engaños. Los productos ecológicos están certificados mediante sellos que garantizan su autenticidad. Sin embargo, algunas marcas utilizan términos confusos que pueden generar ambigüedad.
Comparar precios. Es posible que algunas personas piensen que los productos ecológicos son más caros, pero la realidad es sorprendente. Encontrarás una amplia gama de productos ecológicos en el mercado, de excelente calidad y a precios realmente competitivos.
Estas recomendaciones te ayudarán a adoptar fácilmente una alimentación ecológica y saludable. Aunque parezca difícil, es posible tener una dieta nutritiva al mismo tiempo que ahorras dinero en comparación con llenar tu carrito de compras con productos innecesarios en un supermercado convencional. La alimentación ecológica es garantía de salud personal y minimiza el cambio climático.
Con información de Mercedes Blasco, Nutricionista, Master en Nutrición y salud www.bioecoactual.com