De Volkswagen a Mitsubishi, la extensión del engaño medioambiental de los motores de coches

Un simple truco, inflar más los neumáticos, servía a la japonesa  Mitsubishi para burlar la normativa medioambiental en, al menos, 600.000 de sus motores –la mayoría de ellos montados en minicoches gasolina de la marca Nissan–. La protección de la calidad del aire chocaba con la venta de vehículos. La empresa ha reconocido este miércoles que falseó las cifras sobre lanzamiento de gases de cientos de miles de sus unidades.

Trenes, ambiente y desarrollo

Pensar hoy, un proceso de crecimiento de un país sin tener en cuenta especialmente el sistema de transporte sobre el cual se va a apoyar el mismo, es pura irresponsabilidad y es como construir una casa sin cimientos. Más pernicioso es aún, planificar como se viene efectuando en la Argentina en los últimos 15 años, un sistema de transporte sobre la base del automotor y anunciando cada tanto la construcción de rutas y autopistas por cifras millonarias. En un esquema de desarrollo nacional y racional, la ausencia del ferrocarril como motor del despegue económico es poco menos que suicida.