La labor social del Instituto Castelao en su lucha por recuperar del alcohol y las drogas a adictos, ayuda también a las familias de estos enfermos a superar el bache emocional que supone el proceso. El Instituto dispone de varias ubicaciones por todo el país y brinda un tratamiento integral para la recuperación y reinserción de los pacientes con adicciones.
Las adicciones son uno de los mayores problemas de la salud pública a nivel mundial: millones de personas son víctimas de esta enfermedad pero pocos tienen el valor, la contención y la constancia para dejarlas.
Afortunadamente, existen centros especializados capaces de revertir las situaciones más complejas. “El objetivo de nuestro centro médico es recuperar al mayor número de enfermos posible. A día de hoy podemos afirmar que recuperamos a más del 85% de los pacientes tratados”, aseguran los responsables del Instituto Castelao Málaga, consultados para este artículo.
¿A qué responde este elevado porcentaje de éxito en los tratamientos? ¿Cómo se enfrenta un problema de adicciones? ¿Cuál es el secreto para una recuperación óptima? Las respuestas, a continuación.
Tratamiento integral en 4 fases
Una adicción es una enfermedad mental que debe ser abordado desde una variedad de perspectivas para ser superado. Por ello, en el Instituto Castelao proponen un tratamiento integral que va desde la desintoxicación a la reinserción, pasando por la deshabituación y rehabilitación.
Durante todo el proceso se combinan terapias grupales, individuales, familiares y de pareja, siempre con la guía de terapeutas y adictos recuperados, debidamente formados para entender la enfermedad y compartir la recuperación.
En la primera fase, la de desintoxicación, el paciente deja de consumir bajo supervisión médica y con ayuda de medicación para evitar el síndrome de abstinencia. Luego, durante la deshabituación, “se identifican los hábitos y actitudes alterados por la adicción y se sustituyen por conductas que mejoren la calidad de vida y el entorno familiar, social y laboral del paciente”, puntualizan los especialistas.
Una vez superadas esas dos etapas, comienza la rehabilitación, en la que se trabaja la recuperación de las habilidades sociales perdidas durante la enfermedad.
Finalmente, en la fase de reinserción, se prepara el regreso al entorno familiar y social normalizando su vida. Aquí se prolonga el seguimiento terapéutico, para evitar recaídas y hacer más fácil la vuelta a sus hábitos cotidianos.
Las instalaciones son una parte importante del tratamiento
La experiencia y la formación de los profesionales es, sin duda, el componente esencial para la recuperación de un adicto. Pero el escenario donde se aborda el tratamiento, es decir, la clínica de desintoxicación, debe acompañar armónicamente el proceso.
“El paciente agradece un entorno tranquilo y agradable para su recuperación. Nuestras instalaciones están diseñadas para responder a las necesidades de las actividades diarias de los enfermos”, indican desde el Instituto Castelao, que tiene centros en A Coruña, Almería, Madrid, Murcia, Sevilla y Málaga.
Las instalaciones de la Clínica de desintoxicación de Málaga incluyen gimnasio, infraestructuras deportivas, comedor, habitaciones individuales climatizadas y tuteladas, sala de terapia, sala de lectura y sala de arte-terapia. Y ofrece diversas modalidades de tratamiento, entre las cuales encontramos: tratamiento ambulatorio, centro de día, y centro de día con residencia tutelada.
Pero además, está emplazada en un entorno natural casi virgen, cerca de la playa de Algarrobo, con preciosas vistas al Mediterráneo y rutas para practicar senderismo en las inmediaciones de la finca.
Modalidades: Ambulatorio o centro de día
En el centro del Instituto Castelao Málaga puede realizarse el tratamiento de recuperación de forma ambulatoria. “Esta tipología de tratamiento consiste en asistir a terapias grupales e individuales semanalmente; la idea es modificar los hábitos comportamentales del adicto relacionados con el consumo y cambiar las circunstancias ambientales y personales que derivan en el mismo”, indican los especialistas.
Otra opción es seguir el tratamiento como centro de día con residencia tutelada para la recuperación de adicciones en Vélez Málaga, con la asistencia de un amplio equipo de terapeutas, monitores, médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería y psiquiatría. Según los responsables del centro, “el equipo acompaña al adicto desde su primer día de ingreso, durante todo el tratamiento de recuperación y su posterior seguimiento”.
Para un adicto, la voluntad no es suficiente
El tratamiento, el equipo profesional y las instalaciones vienen a acompañar al paciente en su evolución, ya que no se trata de un proceso fácil.
Como norma general, se considera que una persona que no padece la enfermedad de la adicción, es capaz de detener o reducir el consumo de cualquier sustancia con su voluntad, cuando percibe los primeros síntomas de abuso. “No es así en el caso de un enfermo. Para un adicto, la voluntad no es suficiente”, explican desde Castelao.
Muchas veces, tanto al paciente como a su entorno, les cuesta reconocer que existe una adicción y que la misma debe tratarse como una enfermedad. Durante mucho tiempo, creen que podrán controlar la adicción por sí mismos.
“Nada más lejos de la realidad”, responden los especialistas y explican que “las características psicológicas y neuronales de un enfermo suponen una barrera infranqueable a la hora de abandonar el consumo”.
En pocas palabras, ante las primeras señales de una adicción es esencial buscar ayuda y asesoramiento profesional. De ello dependerá que el paciente pueda abandonar el consumo y rehacer su vida.
Por Virgina Gutierrez