Prevalencia de virus por la deforestación

La deforestación puede provocar la propagación de virus porque los animales salvajes infectados suelen acercarse a los humanos y sus mascotas.

Sin embargo, existen otras formas de propagación de los patógenos, por ejemplo, a través de vectores como los mosquitos. La destrucción de los bosques tropicales daña la diversidad de mosquitos, haciendo que las especies más resistentes prevalezcan y los patógenos que portan puedan volverse más comunes.

Así lo afirman los científicos de la Charité – Universitätsmedizin Berlin, en colaboración con el Instituto de Investigación sobre la Vida Silvestre y la Vida Silvestre Leibniz que examinaron cómo la destrucción de los bosques tropicales en África occidental para dar paso a plantaciones o asentamientos afectó la distribución de ciertas especies de mosquitos y los virus que portan.

Identificación de virus en mosquitos

Estudiaron los mosquitos en el Parque Nacional Taï en Costa de Marfil, donde el uso de la tierra varía desde la selva primaria hasta el bosque secundario, plantaciones de cacao y café y aldeas. Esto brinda a los científicos muchas oportunidades para comparar diferentes hábitats de mosquitos.

“Identificamos las especies de mosquitos que habíamos capturado y las analizamos para detectar infecciones virales”, explica Kira Hermanns del Instituto Charité de Virología, primera autora de los resultados del estudio. “Luego observamos cómo la composición de las especies de mosquitos difiere entre los diferentes tipos de uso de la tierra, dónde están presentes ciertos virus y qué tan prevalentes son”.

Los ecosistemas saludables, como los bosques tropicales primarios, albergan muchos virus entre los animales que los habitan. Sin embargo, los ecosistemas cambiantes también afectan a los virus. La profesora Sandra Junglen, jefa del Departamento de Ecología y Evolución de Arbovirus del Instituto Charité de Virología, quien dirigió el estudio, dijo: “Descubrimos 49 especies de virus, con la mayor diversidad de huéspedes y virus observados en hábitats vírgenes o mínimamente perturbados”

Resultados del estudio

La mayoría de las 49 especies de virus diferentes eran relativamente raras en las áreas de estudio, pero nueve de ellas eran comunes en una variedad de hábitats. Según los científicos, la prevalencia de los cinco virus está aumentando en hábitats perturbados y alcanza las cifras más altas en zonas densamente pobladas por humanos.

“Esto significa que la tala de las selvas tropicales provoca una disminución de la biodiversidad en todas las especies de mosquitos, lo que cambia la composición de los tipos de huéspedes. Algunas especies de mosquitos resistentes se han multiplicado con mucho éxito en las áreas despejadas, trayendo consigo sus virus”, afirma Junglen.

La composición de especies de una zona también tiene una relación directa con la prevalencia de los virus que transmite. “Si una especie huésped es muy abundante, es más fácil que los virus se propaguen”, explica el virólogo.

“Se demostró que todos los virus que encontramos que eran más comunes estaban presentes en una determinada especie de mosquito. Los virus pertenecen a diferentes familias y tienen diferentes propiedades”, señala. “Eso significa que pudimos demostrar por primera vez que la propagación de los virus no es atribuible a una estrecha relación genética, sino a las características de sus huéspedes, especialmente aquellas especies de mosquitos que se adaptan bien a las condiciones ambientales cambiantes en hábitats que han sido perturbados”.

Conclusiones

Los virus que estudiaron los científicos sólo se transmiten entre mosquitos y no pueden infectar a los humanos, pero con otros virus puede que no tengamos tanta suerte.

“Nuestro estudio deja claro lo importante que es la biodiversidad, y que la disminución de la biodiversidad facilita el desarrollo de ciertos virus porque hace que sus huéspedes sean más abundantes”, enfatizó Junglen.

Ecoportal.net

Con información de: https://www.sustainability-times.com/