¿Cómo mejorar la eficiencia energética de tu hogar?

La mayor parte de los edificios construidos antes de la aparición del Código Técnico de Edificación del 29 de marzo de 2006 tienen una mala eficiencia energética y un ineficiente aislamiento térmico.

La eficiencia energética es un criterio que hace referencia a la optimización del uso de la energía para conseguir alcanzar ciertos niveles de servicio y de confort, reduciendo el consumo al mínimo.

Mejorando la eficiencia energética de tu hogar puedes reducir la factura de la luz en unos porcentajes bastante interesantes, permitiéndote así ahorrar mes a mes.

En este artículo te vamos a dar algunos consejos que pueden ayudarte con esto, pero te recomendamos ponerte en contacto con asesores energéticos para que estudien tu caso en detalle y puedan darte soluciones personalizadas.

Consejos para mejorar la eficiencia energética de tu casa

1.      Mejora del aislamiento

Aquellos edificios que ya tienen un determinado tiempo cuentan con unos estándares de eficiencia bastante antiguos y pueden hacerte perder mucho dinero en cuanto a aparatos de climatización se refiere.

Existen ciertos métodos y materiales que pueden contribuir a mejorar el aislamiento del edificio, como los siguientes.

  • Sustituir las ventanas existentes por aquellas que sean de doble cristal o con tecnología climalite.
  • Reforzar las paredes.
  • Poner burletes en las puertas.
  • Colocar aislantes para los suelos.

En ciertas ocasiones podría ser eficiente modificar la ubicación de alguna ventana. También podría serlo cambiar el material que se usa para dar forma a las mismas por otro que resulte más eficiente a nivel térmico.

2.      Renovación de los electrodomésticos

Si te pones a pensar en el tiempo que ya tienes los electrodomésticos te darás cuenta de que ya son bastantes años. Si echas un vistazo a la eficiencia energética de los mismos, llegarás a la conclusión de que es bastante baja, totalmente ineficiente.

Cambiar los electrodomésticos más antiguos por nuevos es una de las inversiones más importantes que podemos hacer (ten en cuenta que en el listado encontraremos neveras, televisores, lavadoras, etc.).

Sin embargo, es una inversión interesante que podrás empezar a amortizar desde el primer momento.

Eso sí, no se trata de comprar cualquier cosa. Debes comprobar previamente las etiquetas de eficiencia energética e invertir en dispositivos A + + o A + + +.

3.      Sustitución de bombillas antiguas

La iluminación del hogar supone uno de los gastos más importantes, especialmente si contamos con bombillas antiguas, con una tecnología poco eficiente.

Ten en cuenta que las usas a diario, así que aquí tienes un punto con el que puedes empezar a trabajar.

Los expertos recomiendan hacer el cambio por bombillas de LED, ya que esta tecnología puede reducir el consumo entre un 50-70% en comparación con tus bombillas antiguas.

Además, tienen un tiempo de vida útil mucho más prolongado, no emiten calor, no contaminan y consiguen un buen equilibrio entre calidad/precio.

4.      Revisa tu aparato de aire acondicionado

Aunque esto se podría haber incluido en el apartado de los electrodomésticos, creemos que tiene tanta importancia que le hemos creado su propio apartado.

Lo interesante sería invertir en un aparato de aire acondicionado con tecnología Inverter. No solo eso, sino que deben contar con la etiqueta energética A.

Otro dato que debemos comprobar sobre el aparato es su SEER (acrónimo de Eficiencia Energética Estacional) y asegurarse de que tenga una puntuación superior al 6.1.

Por supuesto, un correcto manejo del aparato también contribuirá a la reducción de su consumo: es recomendado que la temperatura esté comprendida entre los 21 y los 25ºC.

5.      Cambios de calderas

Invertir en calderas de gas de condensación pueden suponer un importante ahorro de hasta un 30% en relación con los modelos convencionales.

Sin embargo, por ciertas razones no siempre es posible hacer el cambio completo del sistema de calefacción, aunque sí que podremos hacer algunos ajustes para lograr interesantes mejoras.

·Recuerda regular el termostato y los controles de la calefacción y del agua caliente sanitaria.

·También puedes usar inhibidores químicos cuando se cuenta con una calefacción central. Así se minimiza la posibilidad de que aparezcan depósitos corrosivos que afectan al sistema y repercuten negativamente en la eficiencia.

¿Existe alguna obligación para mejorar la calificación energética?

No es algo obligatorio. Sin embargo, si eres el propietario del inmueble tendrás que evaluar los proyectos que tengas a corto y a largo plazo, para llegar a conclusiones.

Ten en cuenta que una mejora de la calificación energética quiere decir que se minimizan los gastos mensuales, propiciando así el ahorro. Además, considerando lo mucho que las tarifas de los servicios están aumentando, no es mala idea.

Por otra parte, conviene tener en cuenta que una calificación energética mayor también ayuda a que se revalorice el inmueble, pudiendo venderse a un precio más alto cuando llegue el momento.

Aunque no sea algo obligatorio, te recomendamos seguir estos consejos para mejorar la calificación energética de tu hogar.