Se viene el fenómeno climático de El Niño: cómo nos afectará

De acuerdo con las predicciones, el fenómeno de El Niño podría subir los promedios de temperatura en el año 2023 y 2024 hasta ser los más altos registrados hasta ahora, adentrando al planeta en un umbral de riesgo nunca antes alcanzado.

Luego de tres años de presencia de La Niña, cuyas influencias se extendieron por el clima global, este régimen meteorológico ahora se ha esfumado. Se prevé que será reemplazado por una fase cálida del Océano Pacífico tropical en los próximos meses.

El fenómeno conocido como "El Niño" tiene el poder de alterar la normalidad del clima, especialmente en cuestión de tormentas y precipitaciones. Cuando éstas se acumulan, es posible que provoquen inundaciones, aún si es en algunas ocasiones.

Los estudios iniciales predicen que el año 2023, y específicamente 2024, podrían ser los de más alto promedio de temperatura global jamás registrados, acercando al planeta peligrosamente cada vez más al umbral donde comenzaría el calentamiento global.

La meteorología argentina podría experimentar excesivas lluvias en la temporada primavera-verano, además de temperaturas más altas que lo habitual con una humedad elevada.

Los pronósticos acerca de la fuerza del fenómeno de El Niño 2023/24 aún no están claros. Algunas predicciones climáticas muestran que podría ser un evento moderado, mientras que otros informes sugieren que sería bastante intenso.

A medida que avanza el año y entramos en la fase activa de invierno y primavera, será más evidente comprender cuán extremos son los cambios ambientales y qué tipo de efecto local y global tendrán en las tasas de lluvia y temperatura.

El Niño ya es casi un hecho

Las previsiones indican que el fenómeno de "El Niño" comenzará en julio de este año, dando lugar a un período invierno-primavera con más humedad de lo habitual.

Las predicciones apuntan a que el fenómeno "El Niño" tendrá una influencia del 70% en el clima argentino en un futuro próximo. Esto podría causar cambios significativos en los patrones climáticos a mediano plazo.

Más lluvias

Después de un largo período de lucha contra las sequías y las altas temperaturas, las perspectivas para la temporada de otoño de 2023 parecen mucho más prometedoras, con la posibilidad de un aumento de las precipitaciones. El comportamiento de la temperatura en el Océano Pacífico será clave para determinar el clima durante esta temporada. El centro de Argentina, Uruguay y el sur de Brasil podrían experimentar más precipitaciones en comparación con otras regiones debido al calentamiento más temprano y mayor de esta temporada.

Primeros indicios de El Niño

Recientemente, el patrón de 'La Niña' se ha ido y ha causado varios pulsos húmedos que resultaron en lluvias abundantes durante el mes de marzo. Esto apunta a un cambio en el flujo de aire húmedo en el centro de nuestro país, según informó el portal Infoagro.

En ese marco, señalan que “a raíz del comportamiento del clima en el mes de marzo, sumados a la presencia de un “Niño costero o Niño Modoki” frente a las costas de Perú y Ecuador, los modelos climáticos ya comienzan a señalar esta tendencia a que El Niño se anticipe y comience en el primer semestre o en el paso del primero al segundo”.

Qué es El Niño

El fenómeno de El Niño es una situación en la que el Océano Pacífico ecuatorial experimenta un aumento de temperatura de hasta 3°C por encima del rango normal, provocando diversos cambios en los patrones climáticos a nivel mundial. Las fluctuaciones de temperatura en el Océano Pacífico generalmente son causadas por El Niño y La Niña. El Niño representa un aumento de la temperatura, mientras que La Niña describe temperaturas más bajas de lo normal, y cada evento sigue al otro.

Un otoño más húmedo

A medida que hacemos la transición de marzo a abril y mayo, se espera que la lluvia sea más consistente con los niveles promedio. Desafortunadamente, para algunas áreas agrícolas del país, esto puede ser demasiado tarde para obtener beneficios significativos.

Para que los sistemas de agua de algunas provincias argentinas vuelvan a sus niveles óptimos, es fundamental aumentar la humedad ambiental. Esto conduciría a lluvias más frecuentes y, por lo tanto, ayudaría a revivir estos sistemas de agua. De todas maneras “la variabilidad seguirá siendo uno de los factores más determinantes dentro del escenario local”, dijeron especialistas.

En el desarrollo del otoño, las temperaturas se estarán moderando de forma paulatina y gradual, si bien el calor comenzará a quebrar de a poco, al aire frío le va a costar instalarse de lleno.

Con información de losprimeros.tv