El Asma es una enfermedad muy común a nivel mundial del aparato respiratorio que aqueja a niños y adultos. En este artículo te facilitaremos algunas medidas preventivas y tratamientos caseros para aliviar el estrechamiento de las vías respiratorias y evitar las molestias del Asma.
Qué es el Asma
El Asma es una enfermedad del sistema respiratorio que consiste en una inflamación crónica o estrechamiento de las vías respiratorias, que ocasiona hiperreactividad bronquial, dificultades para respirar, opresión en el tórax, sibilancias y tos. Los ataques de asma pueden ser frecuentes y también generar falta de aire, secreciones, disnea.
Se diagnostica por un profesional que realizará pruebas de alergia, exámenes de pulmones, de sangre, radiografías, entre otros.
El asma empeora en fumadores, con la contaminación atmosférica, si existe sobrepeso, entre otros.
Esta enfermedad de las vías respiratorias pude detonarse ante el ejercicio, durante la noche, ante situaciones de estrés, por alergias, con las variaciones estaciones o climáticas, etc.
El asma en consecuencia puede provocar enfisema, bronquitis crónica, neumonía e insuficiencia cardiaca, dificultar para conciliar el sueño, y malestar general.

Remedios caseros y naturales para aliviar el Asma
Siempre consultando previamente a un profesional y con el diagnóstico preciso, podemos abordar algunas medidas en casa para aliviar los síntomas que se producen durante una crisis asmática.
Jengibre: tomar un té por sus propiedades broncodiladoras y una enzima que mejora los músculos de las vías respiratorias.
Cebolla: contiene flavonoide y propiedades antiasmáticas que relajan los bronquios y las vías respiratorias.
Ajo: muy eficaz para combatir esta afección por sus propiedades antiinflamatoria.
Limón: jugo con agua o inhalar el vapor de dicho zumo caliente y limpiar el aparato respiratorio.
Miel: limpia el tracto respiratorio tomando una taza caliente mezclada con 2 cucharadas de miel todos los días.
Cúrcuma: con propiedades expectorantes, preparar 1 cucharada en agua tibia y tomarla a diario.
Malva: disminuye la congestión pulmonar. Las flores y las hojas de esta planta ayudan a desinflamar las mucosas y combatir la tos naturalmente tomándola en infusión, 2-3 tazas calientes al día; en jarabe o cataplasmas calientes.
Aceite de eucalipto: dos o tres gotas en una toalla de papel y colocar cerca de la nariz para adsorber sus propiedades que ayudan a descongestionar o respirar los vapores.
Aceite de mostaza: calienta el mismo y a estar tibio masajear el pecho o la parte superior de la espalda para mejorar la respiración.
Calabaza: preparar una mezcla licuando 1 taza de agua con 60 semillas de calabaza, agregar 1 cucharada de miel, 25 gotas de própolis y tomar 1 cucharada cada 4 horas.
Romero: hacer una infusión o hacer vahos te aliviara y te sentirás mejor. También inhalar aceite esencial.
Otras hierbas utilizadas en infusión que pueden colaborar ante esta enfermedad son: tomillo, pulmonaria, ambay, gordolobo, manzanilla, anís, laurel, grosella espinosa india.
Medidas y tratamientos para el Asma
La medicina convencional facilitará broncodilatadores, corticosteroides, terapia respiratoria, nebulizadores, la desensitizacion, medicamentos de acción rápida, etc.
Para prevenir ataques de asma, habrá que evitar la contaminación, el humo de cigarro, el estrés, controlar el sobrepeso, llevar una dieta equilibrada, mantener los ambientes limpios y sin humedad, entre otras medidas.
Evitar recurrir a los remedios naturales sin la autorización del médico, para evitar interacciones medicamentosas y reacciones adversas.
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