Estados Unidos se retira del Acuerdo de Paris sobre Cambio Climático

Por Cristian Frers

El mandatario anunció que tomó la decisión "por el bienestar de los ciudadanos estadounidenses”. Además señaló que el acuerdo suscrito en París por el Gobierno de su antecesor, Barak Obama, era el "ejemplo más reciente" de Washington, firmando acuerdos que no benefician a Estados Unidos.

El convenio tiene como objetivo que la emisión conjunta de gases de efecto invernadero de los países signatarios quede utópicamente en cero para la segunda mitad del siglo. Para ello, deberían emitir gases a un nivel que pueda ser compensado a través de mecanismos naturales o artificiales a fin de absorber el carbono de la atmósfera.

Un día después de que Trump retirara a los Estados Unidos del acuerdo,la Casa Blancase negó a contestar si el presidente pensaba lo mismo. Mientras muchos otros líderes se comprometieron a enfrentar este problema, aun sin los Estados Unidos, los asesores del presidente norteamericano salieron a defender su posición y, ante las presiones de los medios de comunicación, expresaron no saber cuál es el pensamiento del presidente sobre los datos científicos. El hecho de que Estados Unidos se retire del acuerdo de París podría traducirse en impactos severos para el clima en el mundo, con fenómenos cada vez más extremos de inundaciones, incendios forestales y sequías que, en países como Argentina, provocarán altos costos humanos como financieros.

El mismo día, que Estados Unidos se retire del acuerdo, se confirma la noticia que una enorme masa de hielo de 5.000 kilómetros cuadrados de superficie (el tamaño dela Ciudadde Londres, de la isla de Mallorca o de tres veces la ciudad de México) está a punto de desprenderse del continente helado. 

Una enorme grieta en el hielo dela Plataforma LarsenC, que venía agrandándose de forma progresiva, comenzó a avanzar de forma desmedida, y se amplió diez y siete  kilómetros, en solo una semana, según las observaciones de los especialistas del proyecto MIDAS.  

El punto de ruptura está muy cercano, es decir que en pocos días un gran trozo dela Antártidapodría desprenderse de ella para siempre y convertirse en un enorme iceberg en el mar  a la deriva.

Éste es el golpe de la política de Trump contra el medioambiente y la censura a científicos que investigan el cambio climático y el rechazo al plan que Barak Obama propuso para disminuir las emisiones de carbono -aun cuando esta nación es la segunda productora de gases de efecto invernadero-.

La retirada de EEUU de los compromisos adquiridos en París, en diciembre de 2015, supone que  Norteamérica sale de ese grupo de naciones, donde están comprometidas todas las primeras economías del mundo. De hecho, sólo dos países no han firmado el histórico documento: Siria -al que seis años de devastadora guerra ha impedido su inclusión- y Nicaragua, que se retiró de las negociaciones como protesta por la falta de ambición y de compromiso; incluso Corea del Norte ha firmado el acuerdo. Este acuerdo histórico indica el principio  del fin de la era de los combustibles fósiles. La velocidad con la cual casi todos los países se comprometieron con sus objetivos revolucionarios da cuenta de la urgencia del problema que enfrentamos.

Pero se trata de sólo un paso en un largo camino. Lo que importa ahora es cómo cada país implementa el Acuerdo y acelera el cambio. París fue solo el comienzo de un viaje que nos liberará de la contaminación del carbono. Y queda un largo trecho por recorrer.

Ecoportal.net