La sidra de manzana casera y natural es una bebida probiótica que ayuda a eliminar las bacterias nocivas de nuestro organismo y a combatir la candiadiasis, a su vez, diversifica y fortalece las bacterias buenas de nuestros intestinos.
Otra de sus propidades consiste en el frotalecimiento del sistema inmunológico y la reducción de alergias.
Además promueve una rápida y fácil digestión a nivel estomacal e intestinal y ayuda a la absorción de nutrientes.
Si la sidra no es casera, está pausterizada y es comercial, es casi seguro que estos beneficios no existan. Por eso la importancia de tomar en nuestras manos nuestra alimentación y no dejarla en manos de la industria, y así, regresar a las prácticas ancestrales que nos traen tanta salud y bienestar.
Un consejo, cuando veas que tus manzanas están comenzando a llenarse de manchitas internas cafés, no las tires ya que es el mejor momento para hacer la sidra casera. Esas manchitas indican que hay actividad bacteriana buena para arrancar la fermentación. Aunque si deseas hacer la sidra con manzanas buenas también se puede, pero con el fin de evitar que las tires, solo corta el pedacito cafecito y conserva los trozos buenos para realizar la receta.
Ingredientes
100% artesanal, 100%probiótica, 100% refrescante
5 manzanas partidas en trozos regulares
2 o 3 litros de agua filtrada sin cloro o de garrafón
1 pieza de piloncillo, panela, papelóno como lo conozcas en tu país. (250 grs. Azúcar mascabo)
1 recipiente de vidrio amplio y suficiente (importante que sea vidrio)
Procedimiento
Colocamos los trozos de manzana en el recipiente y después vertemos el agua a una distancia de 30 cm. aproximadamente para que se oxígene y entren burbujas de aire que favorezcan la fermentación. Se le conoce como golpear el agua u oxigenar el agua.
Agregamos la pieza de piloncillo y tapamos bien con un trapito limpio fijando con una liga o goma para evitar que entre polvo o moscos que llenen de bacterias malas y moho nuestra fermentación. Es importante que sea un trapito porque necesitamos oxígeno para este tipo de fermentación que se llama, fermentación aeróbica.
Dejamos reposar aproximadamente 4 a 5 días, dependiendo del clima. Si hace frío tardará más, pero si hace calor, tal vez se tarde menos. Podrás comenzar a ver actividad en forma de burbujas pasadas las primeras 24 horas.
Observa y remueve tu sidra una vez al día con una cuchara limpia de plástico o madera, nunca metal y tapa de nuevo. Cuando esté llena de burbujas y veas que al moverla hay salida de gas, su aroma es agradable, su sabor ligeramente avinagrado pero dulce a la vez, y el líquido ya está turbio, ese es el momento de disfrutarla, que como expliqué, debe ser al día 4 o 5.
Ya lista, cuela y vacía a un recipiente de vidrio conservando en el refrigerador para detener la fermentación. Bien fría disfruta con tu familia y amigos de una rica, saludable y refrescante sidra de manzana casera y natural.
Opcional: se puede agregar para dar mayor sabor canela, o anís estrellado al momento de servir.
A disfrutar!
Ecoportal.net
Receta de “The Green Kitchen”
muy bueno, pero la botella en la que la guardes en la heladera deberia ser con tapon para que no se explote? si es como la sidra comun se le va el gas si no se tapa bien!
Las manzanas peladas ?