Cultivar tomates en pérgola es un método que puede dar una buena productividad y calidad de esta solanácea.
El tomate es un alimento muy popular en todo el mundo y tiene muchos beneficios para la salud, contiene muchos minerales y vitaminas que ayudan al buen funcionamiento del organismo.
Especialmente los tomates son una gran fuente de vitaminas A y C que ayudan a prevenir la ceguera nocturna y a mejorar la vista. También contienen betacaroteno que ayuda a tomar buen color con el bronceado.
Otros beneficios de los tomates:
Prevención de cáncer.
Aclaramiento de piel.
Reducir el azúcar en la sangre.
Promover un buen sueño.
Mantener los huesos fuertes.
Curar enfermedades crónicas.
Bueno el cabello.
Cómo cultivar tomates
Cultivar tomates en pérgola en casa es muy simple, desde la germinación, hasta la cosecha.
Para comenzar con el cultivo, es posible germinar unas semillas en un poco de papel humedecido que le proveerá de agua en la primer etapa de germinación, y luego se degradará.
El abonado también es clave. Un sustrato con compost hecho en casa con los residuos del jardín y la cocina puede funcionar muy bien.
Es ideal construir un bancal sobreelevado con tierra de calidad y más compost.
No hay que olvidar utilizar coberturas para evitar pérdida de humedad, crecimiento de malezas y temperaturas extremas que puedan afectar las raíces.
Los tomates en pérgola
El punto clave de este sistema, es incluir unas macetas de plástico negras, de las convencionales de cultivo, a las que se les practicará más orificios. Se colocaran enterradas entre los tomates y allí se colocarán los residuos de cocina y funcionarán con un abono en el lugar.
Se construirá además, una estructura con cañas, como una pérgola, que pueda sostener y acompañar el crecimiento de los tomates. Esto facilitará la ventilación, la madurez pareja de los frutos y la cosecha.
Luego restará acompañar el cultivo con tutorados de las nuevas ramas, pequeñas podas y el aporcado de tierra cerca de los tallos para estimular más desarrollo de las raíces.
Después de solo 2,5 a 3 meses se podrán cosechar deliciosos tomates frescos.
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