Vivir solo, provoca una mala alimentación

Las personas que viven solas son más propensas a adoptar una dieta poco saludable y poco equilibrada. Platos poco elaborados, comida precocinada, poca variedad en la dieta y la ausencia de alimentos frescos tienen como consecuencia un menor aporte nutritivo, asegura un equipo de la Universidad de Tecnología de Queensland, en Australia.