Esta es la nota de la finalización de la campaña de Mutantia.ch “Que el miedo se vaya” cuya búsqueda fue que distintas voces pudieran manifestar sus ideas, propuestas y utopías para el mundo post-pandemia.
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Estimad@s lectores
Hoy terminamos nuestra campaña „¡#Que el miedo se vaya!“. En estas semanas participaron veinte personas de diez países, compartiendo sus ideas y visiones para un mundo post-pandemia. Las ultimas siete personas se encuentran al final de este mail. Todas las voces están recopiladas en nuestra página: https://mutantia.ch/es/que-el-miedo-se-vaya/
Esperamos que sean alentadoras, más ahora que la crisis en varios países de América Latina se está agudizando y que el miedo se ha apropiado de muchos sectores. El miedo, que se potencia con anuncios como el del Ministro de Defensa del Ecuador, Oswaldo Jarrin, al habilitar a las Fuerzas Armadas para que puedan usar armas de fuego en contra de manifestantes. O sea: contra personas de sectores vulnerables, que hace días o incluso semanas sufren de hambre y que han acumulado indignación y furia en sus casas, ahora les amenazan con matarlos, por pelear sus derechos en la calle …
O muero en la casa por hambre o en la calle por la represión, dijo uno de los manifestantes durante la movilización el lunes pasado en Quito. El miedo de ese hombre ya se ha convertido en lo que viene haciendo hace años: luchar por la simple sobrevivencia. Hay que seguir luchando, desde diferentes sectores con diferentes herramientas y en lo posible pacíficamente – „hasta que la dignidad sea costumbre“, como decía el cártel de una manifestante.
Saludamos desde Quito, hoy con furia & amor.
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