Copenhague… crónica de un final anunciado y para nada feliz

Por Daniel Carlos Besso

Díganme si acaso no da la sensación de estar viendo al Diablo riéndose con una carcajada siniestra, mirando como la humanidad o por lo menos los que se dicen representarla, gracias a la “CODICIA” que él mismo se encargó de sembrar, marcha hacia su propia destrucción, hacia su final. El asunto se arregla, bajando la emisión de gases de efecto invernadero y eso se logra simplemente bajando el consumo de energía, no con plata. Y los que tienen que dejar de consumir y no quieren, son los que tienen la plata.


Terminó la reunión de la cooperativa y parece que la comisión no se puso de acuerdo.

Alguien que me saque esta sensación que tengo, de estar viendo una película de ciencia ficción sobre el fin de una civilización. Que los dioses del mal celebran su triunfo una vez más sobre las fuerzas del bien. Que se frotan las manos y festejan estar ganando la batalla final… La humanidad desaparecerá de la faz de la tierra,… o al menos, dejará de existir como civilización.

Parece un mal sueño...

¡¡¡¡¡ESTABAN DISCUTIENDO POR PLATA!!!!!

Díganme si acaso no da la sensación de estar viendo al Diablo riéndose con una carcajada siniestra, mirando como la humanidad o por lo menos los que se dicen representarla, gracias a la “CODICIA” que él mismo se encargó de sembrar, marcha hacia su propia destrucción, hacia su final.

El asunto se arregla, bajando la emisión de gases de efecto invernadero y eso se logra simplemente bajando el consumo de energía, no con plata. Y los que tienen que dejar de consumir y no quieren, son los que tienen la plata. (Bah!, son los que fabrican los billetes que nosotros los subdesarrollados, codiciamos como si en realidad tuvieran verdaderamente valor).

Sería como ir a la iglesia, confesar nuestros pecados, estar más o menos convencidos o mandarnos la parte de que lo estamos y luego, en lugar de arrepentirnos y mejorar, tirarle unos mangos al cura para que nos perdone y rece por nosotros.

Nosotros los argentinos, hemos vivido una de las peores sequías de las que tengamos memoria. Por el momento y gracias a “el niño” parece que terminó por ahora.

Puede que me digan que cada 50 años se producen estos fenómenos,… si es verdad, pero de la mano de temperaturas muy bajas, terribles heladas negras. Esta vez y tomado el país como promedio, no fue así, vino con vientos zonda fuera de época.

Vendavales como el que acabamos de ver en San Rafael Mendoza, asustan. Si bien en esa localidad es muy frecuente la caída de granizo, no hay tornados que arranquen árboles.

En fin, sobran las manifestaciones climáticas para advertir que el famoso cambio ya es un hecho.

Hay que dejar de emitir dióxido de carbono, parar de usar el auto o la chata para ir a la ferretería a buscar cueritos para la canilla, si se puede ir en bici.

¡Gordo….! ¡Agarrá la bici o andá a pata que te hace bien!. ¡Gorda…!. No dejés la tele prendida al cuete, no dejés el ventilador andando si te vas de la habitación, el ventilador no refresca el aire, solo los remueve.

¡Nena….!, no te des esos baños kilométricos con tres champúes y 4 cremas enjuagues, acondicionadores y pociones varias.

¡Pibe…! Apagá las luces de las habitaciones que vas dejando, andá acostumbrándote que algún día, la cuenta de la luz la vas a tener que pagar vos.

El calor es la forma final en la que termina toda forma de energía consumida. La energía lumínica calienta los cuerpos que ilumina, el aire revolviéndose por la acción de un ventilador y aún de un aire acondicionado, produce calor, cualquier cosa que se fricciona con otra produce calor. Si se te ocurre porfiarme, Gordo, poné el dedo delante del chorro de la hidrolavadora (Uds. no lo hagan que quema y lastima).

Pero no divaguemos para el lado de la física, para eso pregúntenle al profe, les explicará que es así.

La cuestión que en lugar de ponerse de acuerdo para encontrar soluciones políticas y económicas que permitan a la humanidad continuar avanzando sin consumir tantas formas de energías no renovables (petróleo, gas, carbón), se pusieron a hablar de GUITA: -¿Cuánta guita me vás a dar para que yo me conforme con seguir viviendo como pobre y no te imite?

Si todo el planeta viviese consumiendo la cantidad de energía que demanda la vida confortable de los ciudadanos de los países centrales, el mundo literalmente se prendería fuego en pocos años.

De alguna manera cada ser humano que nace, va a necesitar una cierta cantidad de energía para el desenvolvimiento de su vida, si nace en algún país africano, lo más probable es que, mayormente no intervenga en este asunto, quizás cocine sus alimentos usando “leña de vaca” (bosta seca) y si tiene calor se apantalle con una hoja de palmera tejida.

Pero no todos los que vienen a este mundo, lo hacen en sociedades tan primitivas y con tan bajo consumo de energías.

En las presentaciones hechas sobre esta cuestión, se vio que el ritmo de crecimiento de las temperaturas globales siguen la trayectoria de una curva ascendente, en forma más o menos paralela al aumento de consumo de energías (renovables o no) y desfasada unos pocos años después.

A su vez esa curva de aumento de consumo de energía, también copia otra parecida, que representa el aumento de la población mundial.

Parece ser que todo venía más o menos parejito hasta fines de la década del 30 del siglo pasado. A partir de allí y pese a la ferocidad de las guerras y las enormes matanzas, aparecen los primeros quimioterápicos luego los primeros antibióticos (las sulfamidas y la penicilina). Con estos elementos se pudo prácticamente rescatar de la muerte a personas que antes de eso, se morían irremediablemente.

Pero talvez lo más revolucionario fue la invención de los insecticidas que surgieron accidentalmente como resultado de las investigaciones sobre anilinas que hacía por entonces Ciba – Geigy. El metoxicloro y luego el DDT, permitieron de a poco combatir plagas como la langosta que sumía a muchos países en grandes hambrunas. También permitieron controlar el paludismo, malaria y todo tipo de enfermedades con bichos chupasangre como vectores.


El aumento de la población no solo se debe a la reproducción, sino también al descenso de la mortalidad infantil y al aumento de la expectativa de vida.

Está bastante claro que el aumento del consumo de energía, es el responsable del cambio climático y que este aumento del consumo es correlativo al aumento de la población.

Que intríngulis, ¿No?

También no es menos cierto que no son los países con mayor aumento poblacional, los responsables del mayor aumento de las emisiones, pero todo suma. En los países superpoblados del Asia, la gente se movía en bicicleta y ahora comienzan tímidamente a moverse en motocicletas y algunos autos. Cuando empiecen a popularizarse, minimamente, hábitos occidentales de consumo, vamos a ver “como nos aguantamos LA calor con saco”.

Resolver el problema, no creo que sea una cuestión tecnológica, tenemos los conocimientos para poner en marcha los cambios en el modo de producir energía. Lo que no poseemos por el momento es la solución para que los intereses que se mueven detrás de la matriz energética actual, suelten la mordida. Algo de maligno, como dije antes, debe haber para que, aunque más no fuere, cambien el negocio de las torres petroleras por aerogeneradores. Podrían seguir “cortando el salame” y por más tiempo aun pues no vendría la debacle de cambios catastróficos por no haber hecho los deberes.

Los biocombustibles, si bien nos van a dejar al país alguna platita, no marchan en el sentido correcto. Si sumamos los litros que se deben consumir para producir las oleaginosas, extraer el aceite, saponificar los ácidos grasos, transportar todo, etc., etc.

El resultado en términos termodinámicos y químicos, no da un balance tan favorable.

Básicamente los biocombustibles son una continuidad tecnológica con los derivados del petróleo, se usarán para hacer marchar los vehículos de la misma forma que lo hacían los primeros automóviles a fines del siglo XIX, quemando algo, en lugar de hacerlo en forma eléctrica, con celdas de energía etc., la misma caca con un perfume “campestre”.

Ahora si los europeos, nos van comprar esos biocombustibles para acallar hipócritamente sus conciencias, eso es otra historia.

De lo que se trata y se debería haber tratado en la reunión “de consorcio” de Copenhague, era como hacían entrar por el aro a las sociedades industrializadas, dominantes, del norte, para que llevaran una vida más austera y modesta.

Por el momento, a nosotros, solo aparentemente, nos favorece, pero es ilusorio, vivimos en este planeta y no nos podemos ir a disfrutar las ganancias a otro lado.

Un ejemplo de cómo nos perjudican las macanas del hemisferio norte es el agujero de la capa de ozono. En el norte se consume la mayor parte de los gases a base de sustancias fluoro carbonadas, que impulsan los aerosoles.

Esos gases se usan en el norte pero terminan destruyendo el ozono (O3) y transformándolo en oxígeno común (O2). Como el ozono detiene la mayor parte de la luz ultravioleta que llega a nuestro planeta, el AGUJERO que hay en la capa de ozono sobre el hemisferio sur, permite la llegada a nuestro país y a Chile, de mucha más radiación U.V. que la que reciben en el hemisferio norte. En el norte hacen la macana y nosotros en el sur, nos ligamos los cánceres de piel que ocasiona este disturbio.

Todos sabemos cuanto menos consume el auto o la chata, con el simple trámite de ir a 100km/h en lugar de llevarla chiflando a 130 – 140…… ¡Gordo! No te hagás el distraído, que el otro día te vi pasar con la “mucho bicho”, la trías chiflando, encima con esos 4 faroles que le pusiste arriba el arco, que atajan el aire y silban como el Pulqui. (¡¡¡Qué antiguo que sos!!!)

Bajando las velocidades máximas permitidas, además de reducir los accidentes, lo que no sería poca cosa, podríamos reducir el consumo, no menos de un 5 %.

En tal caso, lo mismo podrían hacer los europeos… pero ¡¡NO!!, meta BMW, meta Lamborghini, AUDI's de los grosos, Ferrari, Porsche, autobahn (autopistas alemanas de velocidad libre) para ir volando bajo…

Si Gordo, vi por “el garage” la feria del automóvil de Alemania, si los vi, son unos fierros INFERNALES, en sentido estricto de la palabra, son tentaciones, para ir a los cuetes…¿a donde?.

Si, también me fijé en las promotoras… forman parte de la seducción, para seguir quemando petróleo.

Dejá las chicas para los muchachos

Esos platos fuertes no son para vos…

¡¡No te hagás el Berlusconi!!

¡Que te va a dar un bobazo!

Sigamos…

El esfuerzo mecánico para vencer la resistencia del aire, se incrementa en relación al cuadrado de la velocidad, por eso cambia tanto el consumo con un poco, nada más que levantemos la pata.

El desmantelamiento del sistema ferroviario, en lugar de mejorarlo, electrificarlo, etc. para nuestro país fue fatal. Las necesidades de combustible por tonelada transportada/kilómetro es entre 7 y 15 veces mayor, por camión que por tren. No es chiste.

Y sigue siendo fatal, que no se haga nada en ese sentido.

Todo por lo contrario, se favorece la desaparición de pueblos del interior.

El desorden de la distribución demográfica, contribuye a un mayor consumo inútil de energía, por ejemplo:

Se favorece, recolectar leche en Trenque Lauquen, para que vuelva luego envasada en un tetrabrick desde 400 km de distancia, lo mismo que los postrecitos, etc.

Las exigencias sobre el tipo de instalaciones, prohibición encubierta de vender productos de producción netamente local, mediante la excusa de los supuestos riesgos para la salud pública, también, de algún modo es una forma de participar de una agresión innecesaria al medio ambiente.

Camión para allá, camión para acá… y Moyano contento.

Pero sobre este asunto de la salvaguarda aparente de los grupos concentrados de la economía, mediante un conjunto de normativas para impedir el nacimiento de industrias locales; estoy masticando algo para más adelante.

Es un asunto muy serio, hay violaciones de derechos constitucionales y cosas pesadas de ese tenor.

Es notable como todo confluye en lo mismo, para proteger los negocios de algunos, si es necesario, le prendemos fuego al planeta.

AAHH! Gordo….., sacate el zapato de buzo para manejar, … y si después llegás tarde te voy a decir como me dijo un jefe mío, cuando yo era recién recibido y llegué tarde:

_ Ingeniero, ¿sabe porqué llegó tarde…..?

_ Había un tránsito bárbaro, me quedé atrancado, atiné a responder.

_ NO, UD LLEGÓ TARDE, PORQUE SALIÓ TARDE.

Salí más temprano y andá más despacio, vas a gastar menos gasoil, menos chata y es más seguro. www.ecoportal.net

Daniel Carlos Besso - Ing.agr. Daniel Carlos Besso - Argentina -Diciembre de 2009